UNA MAÑANA EXCEPCIONAL EN LAGUNA AMARGA

La Laguna Amarga tiene un especial encanto en el invierno. Aunque sea una laguna salada, por los varios minerales que ingresan a ella, también se congela cuando la temperatura externa esté muy baja. Fácilmente puede llegar a los -15°C a -20°C. Raramente, se produce una costa con bloques de hielo empujados por los vientos. Afortunadamente, estuve presente en el momento exacto. Para los que no saben, esta laguna no está dentro del Parque Nacional Torres del Paine, sino se incluye dentro de la Estancia Laguna Amarga, o sea un predio privado colindando con el parque. Hay varios miradores interesantes, pero recorrer la playa necesita de un permiso de los dueños de la estancia, dado que allá hay presencia de estromatolitos, o sea un ecosistema frágil. El lugar es denominado como “geositio” de interés nacional. Resumiendo, vale la pena hacer una parada en los miradores oficiales. En primer plano una hierba de coirón, alimento de guanacos.