Valle de la luna al atardecer

Angosto y largo como un rìo, es este Chile mío. Único en su belleza, por tan variada naturaleza. Del norte les quiero contar que el que bien lo conozca lo va a adorar. Arenas calientes y frías, son las que cubren estas tierras mías. El norte mucho polvo seco es, que en mil colores se convierte al atardecer. Loma cálida.. seca .. ardiente, hacen de cada uno un sobreviviente. Y este desietro tan càlido y hostil, con magia y unas pocas aguas en abril, transforman las secas tierras anteriores, en un milagro de campo bordados de flores. Saturan los vientos mil dulces olores, mezclandose con tan vivo colores, Renace el canto de de pequeños pajarillos, de rojos, verdes y amarillos Nacen a la vida insectos y mariposas, y hasta las lagartijas se sienten buenamozas. Dios quiso darle a estos lugarcitos, unos mágicos toquecitos, y es así que el norte es bello, teniendo su propio sello. Claudia B. B.